¿Vives para el corto plazo o estás construyendo para el futuro? 🌱
Todos somos egoístas, en cierto modo. Tomamos decisiones que aumentan nuestras posibilidades de sobrevivir, que nos ayudan a alcanzar nuestros objetivos y que nos permiten contarnos una historia sobre nuestro papel en la comunidad. Pero hay dos tipos de egoísmo, y la diferencia entre ellos puede cambiarlo todo.
El egoísmo a corto plazo es impulsivo y miope. Es el que nos lleva a saltarnos un semáforo en rojo porque estamos apurados. Es el que permite verter desechos en el río porque es más barato que desecharlos adecuadamente. Es el que nos tienta a hacer trampa para ganar. Pero este tipo de egoísmo, aunque puede parecer rentable en el momento, rara vez nos lleva a donde realmente queremos estar a largo plazo.
El egoísmo a largo plazo, en cambio, tiene una visión más amplia. Entiende que lo que hacemos hoy tiene un impacto en el futuro. Los líderes que piensan a largo plazo apoyan un salario mínimo justo porque saben que, con el tiempo, esto crea valor para todos. No buscan ganar a toda costa, sino crear un entorno en el que todos puedan prosperar, incluyéndolos a ellos mismos.
El juego del corto plazo es tentador, pero cuando todos lo jugamos, todos perdemos. Entonces, te pregunto: ¿Estás tomando decisiones solo para hoy, o estás construyendo algo que durará para mañana y más allá?
Reflexiona sobre tus elecciones, no solo por lo que te darán ahora, sino por lo que significarán en el futuro. Es en esa visión a largo plazo donde encontramos el verdadero valor y la verdadera satisfacción.
Con amor,
Madi “la egoísta a largo plazo”